La población de Chapab (que significa "lugar de agua grasosa"), cabecera del municipio que lleva el mismo nombre, carece de datos acerca de su fundación, pero se sabe que en 1700 perteneció a la real corona bajo el régimen de encomienda. Inició su desarrollo hacia 1821 cuando Yucatán se declaró independiente de la corona española y al llegar al año de 1837, obtuvo la categoría de pueblo perteneciente al Partido de Ticul.
En el transcurso de la época de las conquistas de los españoles en América, habitaban grupos indígenas en toda la región. Los pobladores eran nómadas, es decir, se veían en la necesidad de trasladarse a otro sitio cada determinado tiempo. Uno de los grupos mayas se estableció alrededor de un cenote llamado Yacman, ya que su principal preocupación era el agua. Más tarde, las especies de animales se fueron exterminando, por lo que este grupo maya emprendió un nuevo viaje a encontrar otro lugar en donde vivir. Rodeada de cerros, y con un buen tipo de suelo, llamaron k’ankab-tsek’el al nuevo sitio en donde se quedarían. Aunque había muy buenas especies de cacería, carecían de agua. Por lo que empezó su preocupación. Un día siete mayas salieron en busca de alimentos en la cacería como era de costumbre; uno de ellos llamado Ek Balam se perdió de su grupo, por lo que sus compañeros empezaron a buscarlo, soplando caracoles huecos para encontrarlo. De pronto llegaron a un lugar en donde escucharon cierto ruido bajo la tierra, por lo que empezaron a escarbar debajo de la tierra, entre algunas piedras encontrando miel silvestre. Al hacerlo, escucharon cierto ruido, tal que fue escuchado por algunos españoles que por ahí pasaban. Al encontrarse con ellos, los mayas empezaron a temer. Los españoles, por medio de señas les comunicaban que venían en son de paz, pero los mayas no entendían se limitaron a contestar «Chak kab». Los españoles no entendían este nuevo idioma para ellos, por lo que apuntaron en su agenda y continuaron su camino. Por su parte, el grupo de exploradores mayas siguieron escarbando encontrando con que era un cenote a un costado del cual creyeron encontrar a su amigo Ek Balam convertido en estatua de piedra. Los mayas pensaron en establecerse definitivamente ahí, donde erigieron un templo rústico al lado del pozo. Más tarde, llegaron otros españoles identificando a la población como “Ch’ak kab”, por información anterior de sus compañeros. Intentaron comunicarse con ellos pero ninguno de las dos culturas se entendía. Los españoles solo llegaron a percibir las palabras ya conocidas como “Chak kab”, consolidándose más el nombre de la región. Al final, entre señas, el grupo maya aceptó a los españoles con la única condición de que les hicieran un templo más grande para Ek Balam, su Dios. Los españoles aceptaron dicha petición y fue construido mucho más grande que el anterior en 1753, cambiando únicamente de Ek Balam (maya) a Pedro (español) como deidad principal de aquel lugar. Después de la construcción de la iglesia fueron inmigrando más habitantes mezclándose dos razas y dando lugar al mestizaje.